domingo, 20 de diciembre de 2009

LA NAVIDAD



Llega el tiempo en que la palabra se suaviza y el gesto se dulcifica, tiempo de manos estrechadas y besos estrellados, por donde quiera que vamos. Generosa dádiva, que a muchos les parecerá despilfarro de cariño. De repente, nos convertimos en sembradores de buenos deseos y felicidad; usamos, durante unos días, la vieja fórmula que nos hemos pasado de generación en generación para salir del paso en estos días, pero solamente hasta el 31 de diciembre, en el que a partir de las 00,00 horas, cambiamos por otra, igualmente antigua y conocida.

La Navidad está aquí, a la puerta de las casas en este invierno tardío que quiere recuperar el tiempo y nos pinta las mejillas y la punta de la nariz de rojo helador, como ese personaje que nos ha traído la costumbre foránea, Rodolfo el reno. La Navidad está aquí y comienza con la cantinela entrañable de unos niños que reparten premios y sigue con nuestra propia cantinela repartiendo sonrisas:¡Felices Pascuas!, ¡Feliz Navidad!.

Pero, sobre todo, la Navidad está aquí año tras año porque un día Dios se hizo hombre y hubo quienes creyeron, vieron y amaron, escucharon la Palabra y le siguieron. El origen está en Él y Él es el principio, también es el fin para quienes le amamos.

La Navidad tiene sus partidarios y sus detractores, salvo en los niños, entre los cuales no he encontrado ninguno que reniegue de ella o la rechace. Quizás el secreto esté en hacerse niño, mirar con ojos inocentes estos días y despojarnos de todo lo que no sea ilusión, amor al prójimo, esperanza en que se cumplirán nuestros buenos deseos para con los demás y para con nosotros mismos.

De intentarlo, tenemos que hacerlo pronto y con ganas, entre otras cosas porque “El Enemigo no duerme”, nos sigue a todas partes, pero nada podrá contra nosotros si permanecemos unidos a Jesús. Enemigos, lamentablemente, hay muchos, Dios solamente uno, aunque le llamemos de distintas maneras.

Lo dicho, amigos, llega la Navidad y yo también siembro en vosotros mis mejores deseos de felicidad, para que fructifiquen y podáis ser vosotros también sembradores de paz.

viernes, 11 de diciembre de 2009

SEVILLA



Después de los días de vacaciones de este puente en los que he estado en Sevilla, aunque ya conocía la ciudad, he de confesar que siempre hay algo nuevo, algo que me sorprende, que me enamora, que me atrae y hay algo también que tengo que decir:

Si me pierdo algún día, que me busquen en Sevilla, en cualquier rincón de los muchos y maravillosos que tiene esa preciosa ciudad.

Puede ser en la plaza de la Santa Cruz, sentada en la mecedora del patio que se ve tras la cancela de hierro y donde, si cierro los ojos, me es fácil imaginar cómo el eco trae acentos y palabras costumbristas de las obras de los Hnos. Alvarez Quintero.

Puede ser en el Parque de María Luisa, paseando por las inmediaciones de la estatua a María Luisa Fernanda de Borbón que le da nombre y está rodeada de árboles de la bella sombra u “ombús”.

Puede ser en Triana, tomando tapitas en la calle Betis, desde donde se ve la Torre del Oro y la Giralda en la otra orilla del Guadalquivir; De vez en cuando, un barco llevando turistas y dejando una estela blanca, tendida a los pies de la ciudad, a modo de mantilla, vistiendo de gala el río para ser admirado.



Puede ser en la Calle Sierpes, viendo escaparates llenos de mantones, abanicos y peinetas en tiendas “de toda la vida” que llenan el aire de lunares, que se mezclan con nuevos establecimientos de franquicias y grandes almacenes.

Puede ser en la Iglesia de El Salvador o en la de Nuestra Señora la Esperanza de Triana o si es el día siete de diciembre, durante la Vigilia de la Inmaculada, que me busquen en la Plaza del Triunfo, donde rezaré con el alma y cantaré con las tunas con la misma pasión con la que amo esta bonita ciudad, porque sea donde sea, si me pierdo ¡que me busquen en Sevilla!



Imágenes: Maria Rosa Rodríguez Palomar

lunes, 30 de noviembre de 2009

ENCRUCIJADA



Hace casi tres años, abría mi corazón en estas páginas para contar mis inquietudes y temores respecto a un tema muy personal del cual también hacía partícipes a mis lectores de entonces. Algunos, como Jesús Arroyo, que entonces era Chechu, todavía siguen viniendo por aquí, pero como hay nuevos amigos que quizás no leyeran esa entrada pongo el enlace, porque tiene mucho que ver con la de hoy.

Hablaba de echar raíces, de puntos de referencia personales, de comenzar nuevas vidas, de cambios y traslados, y todavía, si pienso en aquellos días, siento el pellizco en el corazón, la sensación agridulce de haber conseguido una meta, haber aprobado mi oposición, unida a la tristeza de tener que partir a otra ciudad dejando a mi hijo, que tenía diez años.

Lo que entonces me pareció tan terrible, sin embargo, se transformó en una serie de logros, cambios, experiencias y vivencias muy positivas, tanto para mi como para mi hijo que esperaba con impaciencia cada puente para que yo viajara desde Barcelona a Badajoz para verle y me recibía con besos y abrazos que, por cierto, ahora me cuesta tanto sacarle; todo ello hasta que, en poco tiempo, conseguí el traslado de nuevo a casa.

En estos días, he vivido una encrucijada, mi cabeza ha dado vueltas a miles de cosas, mi corazón se encogía unas veces y otras latía esperanzado, ilusionado. He sopesado, evaluado, imaginado, calculado, en fin, he tenido dentro de mi cabeza y de mi corazón un guirigay de sentmientos encontrados, y todo eso porque se me plantea la posibilidad de concursar para unas plazas fuera de aquí. ¿Qué hacer?.

Un traslado, un cambio, la oportunidad de un acercamiento a mis verdaderas raíces, y entiendo por raíces el lugar donde está mi familia y mi hija mayor, otra ciudad: Alcalá de Henares. Curiosamente, me sorprendo a mi misma, sin reconocerme, habiendo aceptado el reto; esta vez, eso sí, mi hijo vendría conmigo.

Es tanto lo que se ha movido dentro de mi con esta elección, que ni siquiera es real todavía, que puede que ni siquiera lo sea, que durante varios días he dudado, y como os decía, he calculado todo lo calculable, han vuelto los fantasmas del pasado, los que me hacían temer las despedidas, pero quizás lo que me ha empujado a pedir esas plazas y dejar a un lado los viejos miedos a la transitoriedad, lo que ha hecho que acepte el reto, es el saber que la vida siempre me va a sorprender, esté donde esté, que la vida, como decía Martín Vigil, sale al encuentro, y no es tan malo levantar, de vez en cuando, el vuelo, mirarla desde otro ángulo, desde otros rincones, otros paisajes para el alma y los ojos.

Si aquello que mis padres nos enseñaron a mis hermanos y a mí, si las idas y venidas con aquel “hogar metido en la maleta” por distintas ciudades nos valió para algo, fue para hacernos fuertes, para saber volver a comenzar, para ser una piña aunque la distancia nos separe. Creo que, si tengo que llevar mi propio hogar plegado en mi maleta, mis hijos aprenderán también, como yo, que lo que vale, lo que perdura, aquello que es tan ligero que puedes llevar siempre contigo, porque nunca será un lastre que te impida levantar el vuelo, es el amor de los que te quieren y a los que quieres, el resto de las cosas materiales, son solamente eso: cosas, aunque sean queridas y también quepan en una maleta, aunque las llevemos con nosotros e incluso hayan estado en nuestra casa durante años.

He pensado que hasta la cosa más querida para mí es prescindible. Sin embargo, ¡cuánto me costaría caminar sin el cariño y el calor de los míos!.

lunes, 23 de noviembre de 2009

MUY PERSONAL


El viernes recibí una carta donde aparecían las palabras URGENTE y MUY PERSONAL en el encabezado, lo cual me sorprendió ya que venía sin sobre, es decir, cualquiera hubiera podido ver lo que decía, con lo que dejaría de ser muy personal, pero, al seguir leyendo, me tranquilicé, era publicidad de una empresa llamada C.I. SALUD, RELAX Y DESCANSO, S.L.

En mayúsculas sobresalían estas palabras “CUATRO REGALOS” y unos cuantos renglones más abajo estas otras “NUEVE REGALOS MÁS” ¡caramba, tenía que leerla!, así que lo hice (pobre de mí), os la copio resumida;

“Apreciada amiga: (¿por qué van dirigida a las mujeres?¿es que somos más fáciles de convencer?)

Queremos entregarte los CUATRO REGALOS que no pudiste recoger la última vez que estuvimos en tu ciudad (¿me llamaron para recoger regalos y dije que no podíaaa?).

Hemos preparado una nueva convocatoria para que recojas tus cuatro regalos, más el regalo de este año. Una extraordinaria MANTA de 1,35 x 2,00 metros, suave y ligera, para este invierno.(Pensé por un momento que eran Papá Noel y sus chicos los que escribían la carta, ¿por qué si no hacen un regalo cada año, aunque fuera una manta?).

(Llegados a esta altura de la carta aún no decía cuál era el objeto de que me escribieran, me dieran todos esos regalos y me consideraran su “apreciada amiga”, seguí leyendo más interesada),

Si vienes acompañada de tu pareja, además de estos cinco regalos, os haremos entrega de NUEVE REGALOS MÁS” (¡joooooeeee!, ¿pero quién es esta gente?¿la ACA: Asociación de Cupidos Anónimos?¿el GAS: Grupo de Alcahuetas Solidarias?. El caso es que no me quieren a mi sola, sino con una pareja)


Después de enumerar la lista de los CATORCE REGALOS entre los que se encontraban, un reloj de pulsera, un mantón de manila, una mopa extensible, un carrito de la compra ¡abatible! y un buen surtido de embutidos ibéricos, además de otras cosas, la carta seguía diciendo dónde y cuándo era la reunión, en un hotel de la ciudad este domingo, e insistía en que fuera CON MI PAREJA para recoger todas esas maravillas;

También nos invitaban a una cata de vino y degustación de productos nacionales, imagino que se referían a la tortilla de patata, al jamón..., no sé, pero descarté mentalmente el caviar y el champán, que hubiera sido propio de cualquier Cupido o Celestina que se precie.

Seguí leyendo aquella extraña carta y, llegando ya al final, todavía no sabía la razón u objeto de la misma, no ponía lo que querían, ofrecían o vendían. En letra pequeña al pie de la misiva a modo de postdata, decía: NOTA: Si nos enseñas 50 € (¡¡solo enseñar!!) te entregaremos otro obsequio más.

He pasado todo el domingo repitiéndome a mi misma que no merece la pena llamar a ningún amigo que haga de pareja, (lo mismo nos piden el libro de familia), ni llamar incluso a mi ex (él si figura todavía en el libro de familia) tan solo para que me acompañen a una reunión donde nos van a dar catorce regalos, (sí, ¡catorce!), sin saber de qué va a tratar esa reunión. Lo mismo se piensan lo que no es y más teniendo en cuenta que el nombre de la empresa organizadora ostenta las palabras RELAX Y DESCANSO;

Además, si tenemos que repartir los regalos, se van a quedar con el reloj y el lote de ibéricos, no creo que les interese la mopa extensible o el carrito abatible, y menos el mantón de manila ¡y a ver quien les dice que no!; todavía recuerdo cuando nos separamos mi ex y yo lo que me costó convencerle de que la colección de reproducciones a laser de los impresionistas era un regalo que él me hizo por mi 30 cumpleaños y no se la podía quedar, parecía no conocer aquello de Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita.

Quizás, si hubiera ido a la reunión con un billete de 50 € y lo hubiera enarbolado, me hubiera llevado, al menos, un regalo. Pero no he ido y me he llevado a mi hijo a la Feria de la Tapa de Badajoz que, además de ser una opción mucho más divertida, no implica ningún interés oculto y me hace sentir mejor.

En márketing, por mi parte, la empresa se lleva un suspenso, por no dar opción a quien elige libremente vivir sin pareja, ni a quienes la dejan, o a quienes son abandonados y son capaces de caminar sin muletas, es decir, sin parejas de turno.

Por cierto, por lo que dice google, la empresa es de colchones. ¡¡Gracias a Dios que no he llamado a nadie!!.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

EL ALMA DEL REVÉS


¡Tengo un blog!, ¡soy bloguera!. Sí, ya sé que lo sabéis, lo que digo son afirmaciones tan obvias que suenan ridículas escritas en mi propio blog y por mí, pero me las repito con frecuencia porque, aunque en principio esas dos frases no sugieran otra cosa que no sea lo que es evidente, tener un blog y, por tanto, ser bloguera, te reviste con una capa de responsabilidad y obligatoriedad de la que es difícil deshacerse.

No se puede uno zafar sin remordimiento de conciencia, desazón o malestar, del yugo que nos une a cada bloguero con nuestro blog o, mucho peor aún, con nuestros blogs. Si es una tarea ardua mantener un buen ritmo de publicaciones y lograr que nuestro sitio sea un lugar vivo donde fluyan las visitas y los lectores, donde se comente, se debata, etc... imaginaos que será para el que tenga más de un blog. Yo confieso que, después de intentar abrir otros sitios web, he desistido. Mi otro blog de Poemas se convirtió en una especie de cofre donde guardé hace tiempo unos cuantos poemas y allí se quedaron para ser leídos por quien quiera, no lo actualizo nunca, pero sigo teniendo visitas en mayor o menor cantidad. Los blogs son como hijos a los que tienes la obligación de cuidar, dar de comer, vestir, etc..

Todo el mundo da por hecho que si tienes un blog es porque tienes algo que decir, porque quieres compartir algo, porque lo que pasa en el mundo te gusta o te disgusta y quieres aplaudirlo o criticarlo, en fin, esperan de ti que, al menos, digas algo. Pero yo, últimamente, me sorprendo buscando cosas que decir ¿Por qué?.

He vuelto del revés el alma por si tiene alguna costura rota en la que no hubiera reparado por donde se me escape la inspiración, ya sabéis, (según la RAE): “El efecto de sentir el escritor, el orador o el artista el singular y eficaz estímulo que le hace producir espontáneamente y como sin esfuerzo”. No es que yo considere que dé el perfil de escritora, oradora o artista para poder alcanzar ese singular estímulo, pero me vendría bien un espontáneo “producir como sin esfuerzo” del que habla la Real Academia, incluso aunque fuera y pareciera con esfuerzo.

No tengo ideas nuevas, tampoco ninguna que pueda servir, una vez sacudida, limpia del polvo del olvido, maqueada con barniz blanco de copal y adornada con guirnaldas de flores menudas, para traerla aquí y sentarla en el alféizar de esta ventana donde contemplar el mundo y, sin ánimo de parecer pretenciosa, también donde el mundo la contemple (¿quién dice que no?), como si fuera recién estrenada.

Tal vez, en noviembre migra la inspiración de la mano de las aves hacia los lugares cálidos.

Tal vez, hay tanto que expresar, que se amontonan las palabras sin concierto y ninguna cede el paso a las otras, con lo cual, todas se quedan en nada, son sentimientos no dichos, ideas desdibujadas, música de silencios en pentagramas vacíos, son esa desazón que transforma la unión del bloguero y su blog en una mala pareja uncida por el yugo de la imposición, la obligación de decir sin que quieras, de contar sin que debas, de escribir sin que puedas.

Lo que salva el amor de esa pareja, lo que hace que siga aquí todavía, lo que quita el yugo pesado y hace ligera la carga, es la magia de momentos como este, en el que, sin tener nada que decir, llegando al final de mi escrito, me invade el sentimiento cierto y profundo de que no migraron todas las palabras, de que mi alma, vuelta del revés como un calcetín cualquiera, no tiene costuras rotas y, al contrario, guarda y se queda con todo; de que, es posible, que hace unos renglones no hubiera ideas viejas que maquear y adornar con flores blancas, pero ahora sí, ahora se han sentado en el alféizar y esperan, a que otro día me sienta incapaz de “producir como sin esfuerzo” y salgan ellas a gozar redivivas una resurrección espontánea.

miércoles, 28 de octubre de 2009

SEÑORA O SEÑORITA



Hace unos meses, cuando tuve que rellenar el formulario para hacer mi perfil en facebook, me sorprendió que en el apartado de “estado civil” aparecieran tantas opciones, algunas totalmente nuevas para mí; si hace unos años el estado civil de una persona podía ser: soltero/a, casado/a, viudo/a o divorciado/a, ahora son, según ese formulario del que hablaba, las siguientes y, si entendemos facebook y las demás redes sociales como un reflejo de la sociedad, nos daremos cuenta de que la cosa ha cambiado un poquito.

Además de las opciones que todos conocemos, las de siempre, que aparecían en el desplegable del facebook para elegir el estado civil: casado/a, viudo/a o divorciado/a que no comentaré porque son opciones que no han sufrido cambios significativos, había otras que, sinceramente, no sé de qué modo interpretar, y no me refiero a la que sigue que he querido ponerla la primera por comentar alguna cosa sobre ella:





- Soltero/a: esta opción es clásica porque siempre ha habido hombres y mujeres sin pareja, ya sea por una elección personal o, simplemente, porque no ha aparecido el príncipe azul o la princesa de turno.

Este término, no se puede negar que ha perdido aquel sentido peyorativo que tenía en el siglo XIX y la mitad del XX, todos recordamos cómo sonaba la palabra “solterona” que, casualmente sólo sonaba mal en femenino, porque decir “solterón” no sonaba tan mal, había un refrán incluso que decía: “Cuarentón y solterón, ¡qué suerte tienes bribón!”, nada parecido a lo que sugería una mujer cuarentona y solterona.

Sin embargo, los solteros de hoy se llaman “singles”, se unen en asociaciones, hacen senderismo, viajan en cruceros donde les organizan fiestas y hasta tienen libros de recetas para ellos solos, en fin, ¡menudo cambio!, imagino a Doña Rosita la soltera, el personaje que creó García Lorca, cambiando el apodo por el de “single” y embarcándose en un crucero donde por la mañana haciendo pilates y por la noche bailando salsa, no tendría tiempo para suspirar por el amor perdido.

-“En una relación”. Puede suponerse que esto equivale al tradicional noviazgo, pero teniendo en cuenta que hay otra opción que es “comprometido/a” en ese desplegable, lo de estar “en una relación” parece que compromete menos, que se está en la etapa del conocimiento mutuo, esa etapa en la que se va al cine, a pasear, a hablar, etc, pero eso sí, sin compromiso ninguno, que para eso está el “comprometido/a”.

- “En una relación abierta”. Esto me descoloca totalmente, tira por tierra mi teoría de que en la opción anterior la pareja se está conociendo para pasar al siguiente escalón, es decir, se empieza sin compromiso y se termina comprometido, pero ¿qué significa estar en una “relación abierta”? ¿es como la jornada de puertas abiertas que se celebra todos los años en Las Cortes españolas? Y, sobre todo, ¿una relación abierta a qué o a quién?. Ninguna de las respuestas que me vienen a la cabeza me parece de recibo, la verdad.

- “Es complicado”. Por si no lo hubiéramos visto todo, esta opción de estado civil es todo un canto a la inconcreción, o sea que si alguien pretendía comerse una rosca en facebook da a entender de una manera clara y concisa que, ¿está casado/a pero se lleva fatal con su cónyuge? ¿está comprometido/a pero la suegra le hace la vida imposible? ¿está enamorado/a del vecino/a del quinto y éste/a ni se fija en él/la?.


Sin duda, es complicado intentar identificarse con uno de esos estados civiles. Todo tiene matices, colores, facetas. Ni los solteros se han de sentir siempre solos, ni los casados nunca lo están, ni las relaciones, por muy estrechas que sean, son relaciones cerradas, ni se pueden cerrar las puertas en una relación abierta, lo malo es si se te cuela alguien sin que te des cuenta.

Recuerdo que antes, una de las cosas que indicaban si estabas casada o soltera era el tratamiento de señora o señorita, dependiendo de uno u otro estado civil. También en eso se pueden apreciar diferencias con los hombres ya que ellos no distinguían entre señorito o señor.

¡Cosas de antes! y ¡cosas de ahora!.

martes, 20 de octubre de 2009

CONSIDERACIONES ACERCA DE LA REGENERACIÓN POLÍTICA



Una persona no es nadie sin sus ideas y, aún más, sin sus creencias. Aunque todo conforma lo que somos: nuestra opinión, nuestra manera de vivir, la manera de expresar nuestro inconformismo o de trabajar para lograr lo que creemos justo; me atrevo a decir que lo que verdaderamente nos mueve, lo que nos lleva a cohesionar la teoría que tenemos en nuestra cabeza con la práctica aplicada a nuestra vida, son las creencias de cada uno, aquello que Ortega y Gasset en “Ideas y Creencias” definió como “el modo de intervenir algo en nuestra vida sin que lo pensemos”. Aunque pudieran ser creencias de tipo religioso, no tienen por qué serlo, uno puede creer en un determinado conjunto de valores, en verdades científicas, etc... siempre válidos mientras que no lesionen los derechos de los que tenemos al lado, de nuestros prójimos.

A lo largo de nuestra vida y, atendiendo a nuestras ideas, ponemos y quitamos muchos reyes, ídolos de barro que se caen con estruendo, confianzas que acaban perdiéndose, proyectos que nos entusiasman y apoyamos con todo nuestro esfuerzo, que salen adelante o se van a pique, desesperanzas que aparecen a traición o esperanzas que son infatigables y, contra viento y marea, siguen caminando a nuestro lado.

En Política, las ideas cambian, evolucionan, crecen; las ideas no son compartimentos estancos porque rigen comportamientos humanos, mudables a merced de los acontecimientos. Esas ideas y el derecho a expresarlas, son nuestro patrimonio mientras las tengamos y nadie debe arrebatárnoslas.

Comenzaba diciendo que una persona sin ideas ni creencias no es nadie, pero enfatizando aún más, diría que sin poder expresar sus ideas o desarrollar y vivir sus creencias, no es nada. Si, además, a esa persona le pisotean sus derechos, le castran culturalmente obligándole a hablar una determinada lengua, sin darle opción a elegir para sus hijos, para su medio de vida, para su entorno, aquella que desee, y le sancionan si no sigue las normas, por otra parte inconstitucionales; esa persona necesita el apoyo de quienes no toleran ese tipo de atropellos, necesita canalizar esa impotencia que puede experimentar con el hecho de que quienes coarten sus libertades sean precisamente los poderes públicos.

En estos tiempos de crisis, en los que los políticos sufren un continuo desgaste y a los que ya no les vemos como representantes de la voluntad popular mayoritaria, se hace necesaria una regeneración política, nuevas caras, nuevos aires, un abrir de par en par las ventanas y dejar que entren personas con nuevos proyectos y soluciones que seguramente no serán la panacea eterna para nuestros problemas, pero si entusiasman y tienden a mejorar nuestra convivencia, ya habrán ganado muchos tantos a su favor.

También se hace necesaria y de manera urgente la reacción del ciudadano, una revolución cívica que de manera pacífica y constante se traduzca en un cambio de actitudes. La actitud beligerante, sin más, es absurda y únicamente puede traer aparejada la intolerancia con los derechos de los otros, la pérdida de la razón que nos asista y conducirnos a la crispación. Sin embargo, una actitud firme y reivindicativa de nuestros derechos que, además, estén avalados por la Constitución que nos dimos en 1978, pueden ejercer una presión mediática y efectiva que dará y nos dará un definitivo Impulso a los ciudadanos.

Quizás esto suene a ciencia ficción o a una idea del mundo tan “flower power” que despierta dudas razonables sobre su desarrollo, pero creo firmemente en lo que he escrito y creo también que podemos llegar a conseguirlo. ¿Soy demasiado crédula? y vosotros ¿qué creéis?.

viernes, 16 de octubre de 2009

LAS DOS ESPAÑAS



Españolito que vienes
al mundo te guarde Dios.
una de las dos Españas
ha de helarte el corazón.

(Machado)

A los españoles se nos va helando el corazón y no sabemos muy bien si es una de las dos Españas o son, acaso, las dos. El arma utilizada es el hartazgo, un arma que a base de cansina, va escarchando la confianza, refrigerando la voluntad hasta hacerla aterirse de frío y recogerse tiritando dentro de la desesperanza y el pasotismo.

Mientras nuestros políticos están en “sus cosas”, unos jugando al “pío, pío, que yo no he sido” o al juego de “tú te callas porque si hablas tú la llevas” (el PP), otros, después de vivir el “ritual” abucheo del día de la Fiesta Nacional y tras contestarle a Esperanza Aguirre cuando ésta le preguntó si iba a ver a Obama, soltándole la frase infantiloide e inmadura: “Tú apoyaste a McCain” que me sonó muchísimo a un: “chincha rabiña, que tengo una piña...” se han ido a pasear por el mundo su osadía, esa osadía que solamente posee el ignorante, llevando como bandera la mentira y la alabanza, según toque y convenga, a gusto del consumidor, aunque para ello tenga que modelar la Historia a su antojo y llevando los comodines de las palabras mágicas: Franco y Dictadura.

¿Creerá de verdad Zapatero que en Israel ha colado la falsedad histórica que quería endosarles?, ¿Pensará que solamente él tiene memoria histórica y los demás no?. Me refiero, por supuesto, a la frase que ha soltado diciendo que “Antisemitismo era la dictadura de Franco”.

Personalmente, creo que para evitar que el Presidente de España, lo queramos o no, vuelva a hacer el ridículo más espantoso, alguien debería asesorarle en serio y revisar el guión con él, sin permitir, bajo ningún concepto, que meta “morcillas” de su cosecha.

Y es que la Historia no se aprende en dos tardes, ni la economía tampoco, ni siquiera la etiqueta y el saber estar, aunque eso es de otro capítulo, lo sé, pero tenía que decirlo.

Las dos Españas, deberían hace tiempo ser una, y ser cosa de todos, un conjunto de realidades y proyectos para todos y donde todos podamos dar nuestra voz y nuestro voto. Lo del voto está claro, ejercemos el derecho sin problemas.

La voz, a veces gusta y otras veces no, ensalza, grita o abuchea porque le duele España, la una o la otra, o el trocito que a cada uno le toca; la voz no debe callar porque no nos guste lo que diga, mientras sea solamente voz y libremente se exprese.

Machado, también decía:

Ya hay un español que quiere
vivir y a vivir empieza,
entre una España que muere
y otra España que bosteza.

Somos muchos los españoles que queremos vivir y estamos en ello. Y hablando de vivir y de voces, el sábado 17 de octubre, en Madrid, muchas voces alzarán su grito por la vida, porque CADA VIDA IMPORTA y juntas pedirán la necesaria retirada del anteproyecto de “ley del aborto”.

lunes, 12 de octubre de 2009

GUARDIA CIVIL, CON ELLOS

TODO POR LA PATRIA

La primera persona a la que Antonio Ortega Lara, funcionario de prisiones, pudo ver al ser liberado y antes de salir del zulo donde le tuvieron secuestrado los miembros de Eta durante 532 días, fue un guardia civil miembro de la UEI (Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil), que estuvo hablando con él y comprobando cómo estaba antes de que Ortega pudiera salir y abrir los ojos a la luz del día. No sabemos su nombre, solamente que era un guardia civil.

Desde su creación, en 1844 por el Duque de Ahumada, la Guardia Civil ha repetido eso mismo durante muchas veces, al igual que ha socorrido y ayudado en inundaciones, incendios y catástrofes de toda índole; en accidentes de tráfico, en la lucha contra el narcotráfico, contra la pornografía infantil, etc..

De todos ellos, los que han estado siempre los primeros y han acudido con prontitud para defender en todo momento la vida, no sabemos sus nombres, es lo que pasa con los héroes anónimos, que no se dan importancia, que cumplen con el deber y la misión que han abrazado sin salir de ese anonimato.

Lamentablemente, cuando sus nombres saltan a los periódicos es cuando son asesinados, cuando, víctimas de algún atentado, vemos sus fotografías y sus caras, muchas veces ¡tan jóvenes!, y es entonces cuando dejan de ser anónimos, es entonces cuando nos enteramos si están casados, si tienen hijos, si los padres de algunos también son o fueron guardias civiles, como ocurrió recientemente con el guardia civil asesinado por ETA Raúl Centeno Bayón, un agente de 24 años que se había criado en un cuartel y era hijo de otro guardia que lloró su muerte, porque también pasa que para muchos de ellos ser guardia siempre fue su vocación, que soñaban con...las mismas cosas con las que podemos soñar todos.

Es entonces cuando para muchos dejan de ser “números”.

En la Cartilla de la Guardia Civil, aparece, entre otros, este artículo:

“En las avenidas de los ríos, huracanes, temblores de tierra o cualesquiera otra calamidad, prestará cuantos auxilios estén a su alcance, a los que se vieren envueltos en estos males”.




Por eso, cuando en la víspera de la Fiesta de su Patrona, la Virgen del Pilar, salta la noticia de que unos indeseables, arremeten a pedradas contra ellos y sus familias desde la impunidad y la miserable cobardía de las ventanas de sus casas, uno se pregunta ¿por qué?.

Y también se pregunta ¿por qué?estos hombres son asesinados y objetivo de los terroristas desde hace décadas al igual que la Policía Nacional o los miembros del Ejército Español, y se pregunta ¿por qué? y ¿por quién? los que tienen como misión preservar la paz, el orden y la vida pueden ser temidos y denostados.

Y tal vez, encuentre la respuesta en uno los artículos de la famosa Cartilla de la Guardia Civil que dice:

“ El Guardia Civil no debe ser temido sino de los malhechores, ni temible sino a los enemigos del orden. Procurará ser siempre un pronóstico feliz para el afligido, y que a su presentación el que se creía cercado de asesinos, se vea libre de ellos; el que tenía su casa presa de las llamas, considere el incendio apagado; el que veía a su hijo arrastrado por la corriente de las aguas, lo crea salvado; y por último, siempre debe velar por la propiedad y seguridad de todos”.

Por la seguridad de todos, sin excepción, así rezan sus normas y es lo que hacen estos hombres cuyos tricornios han brillado en todos los campos y bajo todas las estrellas. Han dado y siguen dando “todo por la Patria”, hasta su propia vida y la vida de los suyos, por eso, desde aquí, mi homenaje y gratitud en su Fiesta:

¡¡Viva la Guardia Civil!!

viernes, 9 de octubre de 2009

CON EL CORAZÓN A CUESTAS


Algunos días tengo la sensación de ir caminando con el corazón a cuestas. Cansado de bombear afectos, pasiones y cariños; de recoger indiferencias y dar las gracias, de amontonar egoísmos ajenos en las aurículas, abiertas al público las 24 horas.

A veces, se asfixia dentro, revuelo de sentimientos encontrados, ventrículos superpoblados de huéspedes hostiles conviviendo con el mejor de los recuerdos, el más tierno de los besos, la mirada más profunda y el primer “te quiero” tatuado en sus paredes.

A veces, tengo que sacarlo fuera, de par en par abiertas las puertas de la palabra, la lágrima rodando entre sístole y diástole, lo pongo en mi mano y me convierto en cicerone de mi misma, recorriendo brechas de viejas heridas y aireándolas con el ánimo de que cicatricen. Por un momento, respira el corazón sin ataduras, soltándose el corsé del tiempo y la paciencia. Parando los relojes para escuchar sus latidos.

Pero hoy lo llevo a cuestas porque pesan los fardos de desconfianzas y desilusiones, porque aún sin germinar tengo semillas de sueños no cumplidos que esperan, y en un recóndito rincón del miocardio un nombre y un deseo para siempre.

lunes, 5 de octubre de 2009

MERCEDES SOSA



(Para escuchar el vídeo, no olvidéis dar al pause en la música del blog, abajo)

Mercedes Sosa, la cantante más importante del folclore argentino, murió en la madrugada de este domingo a los 74 años. En su extensa carrera cantó junto a Charly, Fito, León Gieco, el Flaco Spinetta y Gustavo Cerati, entre muchos otros.

Sufrió la censura de la dictadura militar argentina (1976-1983) y se exilió en Europa, donde prosiguió con su trabajo con grandes figuras iberoamericanas de la canción.

Una de las más bellas canciones que cantó fue la que traigo aqui: Alfonsina y el Mar, que dice algo que yo dedico a Mercedes Sosa

"calló tu voz
para recostarte
arrullada en el canto
de las caracolas marinas"





Alfonsina y el Mar
Por la blanda arena
que lame el mar
su pequeña huella
no vuelve más
un sendero solo
de pena y silencio llegó
hasta el agua profunda
un sendero solo
de penas mudas llegó
hasta la espuma.
Sabe dios qué angustia
te acompañó
qué dolores viejos
calló tu voz
para recostarte
arrullada en el canto
de las caracolas marinas
la canción que canta
en el fondo oscuro del mar
la caracola.
Te vas alfonsina
con tu soledad
¿qué poemas nuevos
fuíste a buscar?
una voz antigüa
de viento y de sal
te requiebra el alma
y la está llevando
y te vas hacia allá
como en sueños dormida,
alfonsina vestida de mar.
Cinco sirenitas
te llevarán
por caminos de algas
y de coral
y fosforescentes
caballos marinos harán
una ronda a tu lado
y los habitantes
del agua van a jugar
pronto a tu lado.
Bájame la lámpara
un poco más
déjame que duerma
nodriza, en paz
y si llama él
no le digas nunca que estoy
di que me he ido.
Te vas alfonsina
con tu soledad
¿qué poemas nuevos
fuiste a buscar?
una voz antigüa
de viento y de sal
te requiebra el alma
y la está llevando
y te vas hacia allá
como en sueños dormida,
alfonsina vestida de mar.


Fuente: musica.com

viernes, 2 de octubre de 2009

LANZAMIENTO DEL ZAPATO


Hoy, la noticia de que un estudiante turco le arrojó un zapato al director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, cuando éste daba un discurso ante alumnos universitarios en Estambul, mientras gritaba: "Sal de la universidad, FMI ladrón", me ha traído a la memoria otro momento histórico donde el zapato se convirtió en herramienta de protesta: Nikita Kruschev golpeando el atril de las Naciones Unidas con su zapato para acompañar sus berrinches en la negociación sobre el tratado de desnuclearización.

Según dicen, analizando, meses después, las cintas donde aparecía Kruschev y su zapato pudo comprobarse que debajo del atril había dos zapatos en los pies del líder soviético, o sea, que el tercer zapato era un elemento intimidatorio de la audiencia que hizo su aparición estelar en un momento que se planeó con anterioridad.

En esta otra historia, que no fue planeada en absoluto y cogió a todos los que la presenciaron por sorpresa, el presidente George W. Bush tuvo  en suelo iraquí, un recordatorio de la oposición ferviente a sus políticas, cuando un hombre le arrojó dos zapatos — uno después del otro — durante una conferencia de prensa. El hombre era Muntadar al-Zeidi, corresponsal para la estación de televisión Al-Baghdadia, de propiedad iraquí y con sede en El Cairo, Egipto.

Igual que en las anteriores, nada menos que en la señorial Universidad de Cambridge, un joven definido como "de aspecto occidental y cabello oscuro" le arrojó uno de sus zapatos al premier chino Wen Jiabao, mientras este pronunciaba un discurso sobre la economía mundial.

Para terminar con esta lista de ejemplos, el año pasado un periodista ucraniano de origen ruso arrojò su bota contra un representante de la OTAN, Oleg Soskin. Dimitriev interrumpió al conferenciante y desde el centro del aula se dirigió al auditorio, integrado casi en su totalidad por mujeres jóvenes, diciendo: "Veo aquí tantas chicas guapas. ¿Por qué gastan su tiempo en escuchar a esos homosexuales viejos, calvos y estúpidos? Ahora les enseñaré qué hay que hacer con esos payasos", entonces, se quitó la bota y la lanzó contra el conferenciante.

Si a todas esas chicas guapas a las que se refería el reportero lanzador de botas, les hubiera dado por tirar sus zapatos, todos estos incidentes que he comentado hubieran cambiado el nombre por otro más fuerte, sin duda, hubieran sido accidentes y con consecuencias más serias.

Las mujeres, quizás, somos más pacíficas y nos contenemos mucho más a la hora de demostrar ira, descontento o furia, porque nuestras armas son mucho más peligrosas, nuestros zapatos ¡tienen tacones!.

Si esta costumbre se extiende, ya me imagino a los fabricantes de calzado haciendo zapatos de tacón sin tacón.

domingo, 27 de septiembre de 2009

VERDE, QUE TE QUIERO VERDE


Comencemos con una adivinanza: ¿Qué es una cosa roja por dentro y verde por fuera?, tic, tac, tic, tac,..se pasa el tiempo....¿la sandía? ¡no!, alguien rojo por dentro y verde por fuera ¡es un socialista!.

Ni la pasarela Cibeles, actualmente llamada Cibeles Madrid Fashion Week, ha puesto tanto empeño nunca por poner de moda un determinado color. El Gobierno de Zapatero lo ha logrado, lo fashion de verdad, lo último entre los afines y más allá de los confines de este Gobierno, es el color verde. Puedes ser rojo por dentro, es más, has de ser rojo por dentro para poderte calzar sin que te haga llagas, el traje “verde que te quiero verde” que pretende extender y popularizar Zapatero y su equipo, para poder llevar sin rubor la variedad de complementos que nos ofrecen desde el Ejecutivo.

Hay que ser crédulo, inocente y bastante bobalicón, para pensar que ese color verde con que quieren teñir todo lo que se menea, hará que salgamos de la crisis, por el mero hecho de poner el apellido “verde” a cualquier cosa que les sirva de argumento para inferir esperanzas en la recuperación. No está mal hacer que la gente mantenga la ilusión y la fe, lo que está mal es el engaño y la manipulación, cosa que este Gobierno sabe hacer muy bien.

Brotes verdes, tasa verde, empleo verde, impuestos verdes, economía verde, informática verde, crédito verde... lo dicho, que lo fashion es el verde. Corazón rojo y cáscara verde. "La subida de impuestos la pagarán las rentas altas...", y ¡tomad! subida del IVA de 2% para todo hijo de vecino. Sandías ellos, pero melones nosotros, no.

"La respuesta de España al desempleo: ser más verdes", Anthony Faiola asegura que Rodríguez Zapatero tiene un plan para acabar con la brutal tasa de desempleo que casi dobla la de Estados Unidos. El plan consiste en crear un millón de puestos de trabajo verdes en la próxima década”, ¡eso está chupao!, si han podido hacer cuatro millones de parados, crear un millón de puestos verdes de trabajo, debe ser pan comido.

Mientras tanto, cuando en el Backstage de la política, la gente se quita y se pone la chaqueta, esta temporada verde, of course!! y se la intercambian de manera natural y aséptica o de forma truculenta y traicionera, que de todo hay; también hay quienes, ajenas a la moda, se visten de negro de la cabeza a los pies, pasando olímpicamente de brotes, tasas, créditos o empleos verdes. Pasando también de la Pasarela Cibeles y la fashion week. Pasando, me temo, hasta de los consejos de papá y los ruegos de mamá, porque si no, no se entiende que alguien pueda ir de esa guisa a un evento como al que asistieron.

domingo, 20 de septiembre de 2009

¡ARRIBA LA ESTEBAN!


Cual campana resonando en el “campanario” de la actualidad, Belén Esteban es contemplada en todo su esplendor por la España del corazón rosa, la del papel couché y por la otra, es decir, por toda España. Ella, como Lady Godiva con su larga melena, en constante sacrificio y lagrimeo, pasea la desnudez de su vida y milagros y, al contrario que ocurría con Lady Godiva, deja que todos pasen y vean el espectáculo de una existencia que sería normal y corriente si no fuera porque el padre de su hija es torero y porque esta mujer, también al contrario de lo que se pueda creer, en su larga melena teñida y enmarañada no tiene un pelo de tonta.

Está en lo más alto del candelabro, sí, del candelabro, porque ese es el lugar donde en este país elevamos a aquellos que tienen la habilidad de convertir sus vidas anodinas, grises o desgraciadas, en objeto de seguimiento, culto y adoración; tienen el extraño don de transformar errores, pecados y carencias, en méritos vitalicios que engrosan un currículo en el que, normalmente, brillan por su ausencia otros méritos, más triviales y secundarios para ese mundo, entiéndase académicos o profesionales, pero que, como en el caso de la Esteban, no son necesarios para conseguir un puesto de trabajo como el que ocupó en el programa de Ana Rosa Quintana o ahora en Sálvame y por los que ha cobrado mensualmente varios millones de las antiguas pesetas, según datos recogidos de internet.

En el candelero, se quedan los personajes de siempre, los que, muy a pesar suyo, no pueden evitar compartir el universo de las revistas y programas del corazón con los advenedizos. Aunque intentan marcar la diferencia hablando por medio de portavoces o emitiendo comunicados para decir, por ejemplo, lo mucho que quieren a su novio y lo mal que les sientan las injerencias de los demás en sus vidas privadas, como en el caso de la Duquesa de Alba, al final están en el mismo ranking; candelabros y candeleros unidos por la gracia de los dioses curiosidad y morbo popular.

Decía antes que la Esteban no tiene un pelo de tonta, y lo mantengo. Puede que no sea un exponente cultural pero es lista, sagaz y despierta ha demostrado con creces ser una superviviente nata, ha sobrevivido incluso al hecho mismo que la subió al candelabro: ser la madre de la hija de Jesulín, haciendo de él una bandera que agita y ondea donde y cuándo le viene en gana o le resulta rentable.

La Esteban es portavoz de sí misma y, desde ese candelabro-chollo donde todos la hemos colocado, comunica personalmente, sin intermediarios ni fríos escritos, en forma de mitín y previo pago, en entrevistas generalmente lacrimógenas que despiertan la solidaridad y el aplauso efusivo del pueblo llano, de ese que también come pollo, cada nuevo cambio que se produce, no sólo en su vida, sino también en la de aquéllos que rozan su existencia o la han rozado en algún momento de sus 36 años.

Puede que sea una friki, puede que ni siquiera lo que ha ganado y gana en ese mundo de cotilleo de porteras le haya servido para invertir en valores rentables y seguros como la salud (¿alguien se cree que lo de la nariz es de la diabetes?) o la cultura (¿por qué sigue dándole patadas al diccionario?) pero nadie puede negar que esta chica ha sabido sacar rentabilidad económica a su relación con Jesulín de Ubrique. En teoría, defiende a su hija, esa por la que "maaaata", muchas madres morirían por sus hijos, pero ella "maaaata".

En estos tiempos de crisis en los que, después de dejarse los codos estudiando, muchos universitarios ven como después de terminar su carrera pasan a engrosar las listas del paro, el caso del personaje Belén Esteban es toda una paradoja viviente. Va a tener razón Góngora cuando escribía:

Ándeme yo caliente
y ríase la gente.
Traten otros del gobierno
del mundo y sus monarquías,
mientras gobiernan mis días
mantequillas y pan tierno;
y las mañanas de invierno
naranjada y aguardiente,
y ríase la gente.

jueves, 17 de septiembre de 2009

¿GANAS DE OTOÑO?


Cuesta volver a la rutina. Pero es que hay rutinas que además de costar, inquietan, atenazan y dan miedo.

Finalizada la segunda parte de mis vacaciones, éstas en Barajas de Melo, aterricé en Badajoz el domingo con la ilusión del comienzo de curso, la del estreno de la temporada otoño-invierno y el de los modelitos de botas, bolsos y chaquetas a la última que esperan en los escaparates a ser rescatados y trasladados directamente a nuestros armarios, lástima que tendrán que esperar hasta que me quite las huellas del verano, y no me refiero al bronceado precisamente.

Venía con desgana, cierto, pero ya digo que con ilusión, una ilusión potenciada gracias a la dulce desinformación en la que he vivido durante estos días, sin televisión, sin comprar el periódico y sin internet. Cuando me he puesto al día, he comprendido que este año volver a la rutina, nuestra vuelta al cole, va a ser algo durilla.

Lo que nos espera son tantas y tan diferentes cosas, a cual más preocupante, que estoy segura que “El Corte Inglés” nos tiene preparada una sorpresa, porque si no no me explico cómo han podido elegir el slogan: “Ganas de Otoño” para la nueva temporada, como no sea porque han confeccionado un modelo basado en las armaduras de la Edad Media para comercializar y cuyos yelmos, sobaqueras, gorjales, manoplas, etc.. actualizados y modernizados, nos protejan de lo que se avecina o ya está aquí.


En primer lugar, del virus de la gripe A, que va a requerir de toda nuestra capacidad de organización a la hora de administrar las vacunas, informar y mentalizar al personal de que las autoridades sanitarias no están en la inopia, también de la inoperancia de aquéllos que negaron que hubiera crisis y hoy tienen más de 4 millones de parados, de las mentiras o “debates terminológicos” tras los que la Ministra Chacón esconde la verdad de una guerra en Afganistán, y hablando de esconderse ¿"andeandarán" los que gritaban el “no a la guerra”?, nos protegerán las citadas armaduras de las ridículas y amenazantes extralimitaciones en las que cayó Arenys de mar convocando consultas populares que son anticonstitucionales; de las amistades peligrosas y dictatoriales que comparten Zapatero y el Rey y que se permiten comparar al monarca con Fidel Castro por su barba y en su propia cara, en fin unas armaduras que nos ayuden a afrontar, de verdad, el otoño con ganas, con muchas ganas, porque aqui va a necesitar armadura hasta el perro.

Mientras tanto, capearemos el temporal como podamos.

domingo, 30 de agosto de 2009

LAS MALAS PERSONAS



La reacción lógica ante las continuas noticias de vejaciones, secuestros, desapariciones de chicas adolescentes y jóvenes que luego aparecen asesinadas o violadas o ambas cosas, o que no aparecen ni vivas ni muertas, o que incluso conviven durante años con sus secuestradores y violadores como ha sucedido recientemente en EE.UU con la joven Jaycee Lee Dugard y, hace algo más de tiempo, a la niña austríaca Natascha Kampusch, por nombrar tan sólo un par de casos; lo lógico, decía, es pensar que los autores de tales hechos son unos malnacidos, para seguidamente aplicarles una serie de insultos que no voy a citar y que todos podemos fácilmente imaginar.

En las cabezas de la gente normal no puede caber que alguien en su sano juicio pueda cometer esas atrocidades sin tener una lucha interior con su conciencia que le haga derrumbarse, confesar su crimen, arrepentirse, etc... como no puede caber en una mente normal que alguien pueda participar en la búsqueda de la víctima siendo su verdugo, o tener a sus propias hijas secuestradas, por ejemplo.

¿Cómo definir a esas “personas” que no sólo cometen un crimen, sino que silencian, guardan, disimulan y viven llevando esa carga dentro de ellos, una carga que a cualquier persona normal le bastaría para destrozarle por dentro y por fuera y que ellos parecen ignorar hasta hacerles aparecer ante los ojos de sus vecinos, allegados o amigos como gente normal y corriente, como apacibles conciudadanos?. Para mí tienen un nombre, aunque puedan tener otros, aquellos que los profesionales en estos temas les den, malas personas, para mí son malas personas, o personas malas, que no sé muy bien si existe alguna diferencia, mala gente con malas intenciones, que hace daño, que hiere, que mata y es capaz de vivir con eso.

No soy psicóloga y, por lo tanto, desconozco si la mala persona nace o se hace. He leído que la personalidad es el comportamiento que surge de la interacción de los aspectos biológicos y el ambiente social y físico y que esto haría referencia tanto a aspectos de temperamento y carácter como a cognitivos e intelectuales. Según dice mi amiga Marisol, que sí es psicóloga, el carácter es algo que difícilmente se puede cambiar, es lo que realmente nos distingue a unos de otros. Moldeado a lo largo de nuestra vida, quizás sea esto lo que hace que me plantee muchas más preguntas, como por ejemplo: ¿es posible detectar indicios en la niñez, cuando se está formando nuestro carácter, que nos indiquen quienes pueden llegar a ser malas personas y poder combatir esa inclinación?

Por otra parte, también ahora proliferan las opiniones a favor y en contra de modificar y endurecer la Ley para que las víctimas no se sientan indefensas por el hecho de que su verdugo sea un menor. Javier Urra, psicólogo forense en la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia y Juzgados de Menores de Madrid, dice: “Todo ser humano necesita unos límites aunque sea para romperlos. Si tu hijo a los cinco años te toma por el pito del sereno a los quince años se hará con la situación. Y esto es grave para él, para ti y para la sociedad que luego se volverá en su contra”, lo cual nos hace pensar que los padres somos una parte importante en la buena marcha de todo este tinglado. Pero también pone en nuestras manos una carga demasiado grande: la responsabilidad de entregar a la sociedad buenas personas, ¿Debemos pensar que a todos los padres de los asesinos y violadores se les escapó de las manos o no supieron poner los límites precisos para que sus hijos no se convirtieran en monstruos?.

Y hablando de padres, no puedo imaginar el dolor de todos esos padres que han tenido que asistir a la muerte o desaparición de sus hijos porque un día se cruzó en sus caminos una “mala persona”, tiene que haber un infierno, un infierno mayor que el de perder un hijo, para esas malas personas que parecen no sentir ni padecer, aquí o más allá de este lugar, un infierno que les haga arrepentirse cada día no sólo de su crimen, sino de haber nacido.