
Comencemos con una adivinanza: ¿Qué es una cosa roja por dentro y verde por fuera?, tic, tac, tic, tac,..se pasa el tiempo....¿la sandía? ¡no!, alguien rojo por dentro y verde por fuera ¡es un socialista!.
Ni la pasarela Cibeles, actualmente llamada Cibeles Madrid Fashion Week, ha puesto tanto empeño nunca por poner de moda un determinado color. El Gobierno de Zapatero lo ha logrado, lo fashion de verdad, lo último entre los afines y más allá de los confines de este Gobierno, es el color verde. Puedes ser rojo por dentro, es más, has de ser rojo por dentro para poderte calzar sin que te haga llagas, el traje “verde que te quiero verde” que pretende extender y popularizar Zapatero y su equipo, para poder llevar sin rubor la variedad de complementos que nos ofrecen desde el Ejecutivo.
Hay que ser crédulo, inocente y bastante bobalicón, para pensar que ese color verde con que quieren teñir todo lo que se menea, hará que salgamos de la crisis, por el mero hecho de poner el apellido “verde” a cualquier cosa que les sirva de argumento para inferir esperanzas en la recuperación. No está mal hacer que la gente mantenga la ilusión y la fe, lo que está mal es el engaño y la manipulación, cosa que este Gobierno sabe hacer muy bien.
Brotes verdes, tasa verde, empleo verde, impuestos verdes, economía verde, informática verde, crédito verde... lo dicho, que lo fashion es el verde. Corazón rojo y cáscara verde. "La subida de impuestos la pagarán las rentas altas...", y ¡tomad! subida del IVA de 2% para todo hijo de vecino. Sandías ellos, pero melones nosotros, no.
"La respuesta de España al desempleo: ser más verdes", Anthony Faiola asegura que Rodríguez Zapatero tiene un plan para acabar con la brutal tasa de desempleo que casi dobla la de Estados Unidos. El plan consiste en crear un millón de puestos de trabajo verdes en la próxima década”, ¡eso está chupao!, si han podido hacer cuatro millones de parados, crear un millón de puestos verdes de trabajo, debe ser pan comido.
Mientras tanto, cuando en el Backstage de la política, la gente se quita y se pone la chaqueta, esta temporada verde, of course!! y se la intercambian de manera natural y aséptica o de forma truculenta y traicionera, que de todo hay; también hay quienes, ajenas a la moda, se visten de negro de la cabeza a los pies, pasando olímpicamente de brotes, tasas, créditos o empleos verdes. Pasando también de la Pasarela Cibeles y la fashion week. Pasando, me temo, hasta de los consejos de papá y los ruegos de mamá, porque si no, no se entiende que alguien pueda ir de esa guisa a un evento como al que asistieron.