SEIS PEQUEÑAS COSAS QUE ME HACEN FELIZ

Recibo de Carlos, autor del blog La nota discordante un meme, el primero de la temporada, que más que eso es una invitación a recordar las SEIS PEQUEÑAS COSAS QUE ME HACEN FELIZ, lo cual le agradezco muchísimo, porque haciendo balance de lo que me gusta o no, buscando entre las pequeñas cosas y no en las grandes, confirmo como él que lo que nos hace feliz la mayoría de las veces, son pequeñas cosas, cosas casi minúsculas, detalles, vivencias cotidianas, que raramente pondríamos en una lista de deseos para pedir a cualquier genio de la lámpara(esto va por tí Pedro, por tu comentario-poema en lo del Atleti).

También he constatado que tengo muchas más cosas de seis que me hacen feliz y me ha costado elegir solamente seis, lo cual me ha hecho darme cuenta de que en los momentos de melancolía, momentos bajos y un poco depres, me bastaría con echar un vistazo a esta lista y también recordar lo que no he puesto aqui, para darme cuenta de que, gracias a Dios, tengo muchos motivos de alegría....y es que, a veces, somos un poco cegatos.

1.- Me hacen feliz los besos, ese minúsculo gesto me hace sentir querida por mis hijos, por la gente a la que yo también quiero, me gusta que me besen, me gusta el contacto con los que amo, achucharles, sentirles. Soy una plasta, según mi hijo pequeño, pero qué le voy a hacer! a mi me hacen terriblemente feliz.

2.- Conversar con mis amigos alrededor de unas cañas o de un tinto de verano, o de un café, me encantan las tertulias, hablar y escuchar. Aquí también incluyo esa especie de literatura epistolar que mantengo con esos otros amigos que están lejos y que son conversaciones en otro plano, no menos apasionado y ameno, en el que abrimos el alma de par en par.

3.- Desayunar churros con chocolate los sábados con mi hijo, si hace buen tiempo los tomamos en la terraza de casa, oyendo el jaleo de la calle y escuchándole a él decir: yo quiero muchos, mamá! porque le encantan.

4.- Saber de aquéllos que conocí en otro tiempo y en otros lugares, pensar que se acuerdan de mí, me hace feliz.

5.- El DDT, que no es un insecticida, sino que una vez al año, nos reunimos mis amigas, Marián, Tita y yo en Madrid, y hacemos el Día del Desmelene Total, o sea DDT, es como la excursión de COU algunos o muchos años después, hablamos durante horas, cantamos, bailamos, en casa de Tita que es la que vive alli y luego salimos "vestidas para matar" a divertirnos por Madrid, lo pasamos genial y lo echo de menos , ya que hace dos años que por unos u otros motivos, no lo tenemos.

6.- Por último, algo que en sí mismo es un gesto tan minúsculo que tal vez no debería estar en esta lista, pero que precisamente porque es algo cotidiano y lo paso por alto siempre, merece un reconocimiento: cuando llego a casa del trabajo y me quito los zapatos de tacón, no hay nada que me haga más feliz que ponerme mis zapatillas de estar por casa. Es lo que me hace sentirme de verdad en mi hogar.


Me quedo, como decía, muchas en el tintero, pero estas que os he dicho son cosas que me hacen sentirme tan bien, que me parece que rozo la felicidad. Me encantaría saber las vuestra y como tengo que elegir a 6 según mandan las normas del meme, ahí van mis nominados:

Terly, Muy Señores míos, Aguijón, Pedro, Rafael,Alawen

Los demás podéis hacerlo si gustáis.

¡AUPA ATLETI!

Celebro con vosotros esta noche mis colores rojiblancos, porque el Atlético de Madrid, ese equipo que llevo dentro y me produce un sentimiento que, como dice la letra del Himno del Centenario de Sabina, no se puede explicar, después de once años, vuelve a estar entre los elegidos, en la Liga de Campeones, y su vuelta, tras este paréntesis en el que como atlética nunca he dejado de apoyarle al igual que el resto de la afición, ha sido una vuelta a lo grande, por goleada, a ese equipo con nombre premonitorio, las cosas que tiene el azar, llamado: Schalke 04, precisamente por 4 a 0.

¡Cómo me hubiera gustado estar en el Vicente Calderón!, que es mi casa, para llorar dentro, pero de alegría, para ver lo que pasaba y corear los goles de Agüero, poniendo el corazón en la cabeza y marcando con ella, de Forlán, de Luis García, y como faltaba un pilar en el que apoyar nuestra esperanza y elevarnos al equipo y a la afición hacia la gloria, ahí lo puso Maxi de penalty, en los últimos minutos, ya con el Vicente Calderón ebrio de alegría.

Gracias Atleti, ¡qué manera de crecer!, ¡qué manera de sentir!, ¡qué manera de vencer!. Gracias Kun, brillante tu actuación, tal vez porque aún brillan el oro de tu medalla en los Juegos Olímpicos de Pekín.

Espero que sigáis así, haciendo grande a nuestro equipo, dándonos alegrías como esta.

Qué manera de subir y bajar de las nubes, ¡qué viva mi Atleti de Madrid!
Qué manera de viajar a la gloria gritando, ¡qué viva mi Atleti de Madrid!

COLLAGE

Hay un collage dentro de mi corazón y también en mi cabeza. Esta palabra aceptada por la RAE, aunque sea un término francés, ¡qué bien define mi entrada de hoy!.

Pegar en el lienzo de la realidad una serie de materiales diversos, multicolores o en blanco y negro, materiales suaves al tacto o rugosos, fríos o cálidos…Así es la vida, recortes de vivencias, sentimientos, instantes que, a modo de post it, van conformando el día a día.

No puedo empezar de otro modo y es que no dejo de pensar que el último día que escribí una entrada fue en la madrugada del miércoles 20 de agosto, justo unas horas antes de que se estrellara el avión de spanair, de que las sirenas inundaran de nuevo Madrid y los alrededores, recordando así otro fatídico día; y en esa entrada del 20 de agosto yo hablaba de mis miedos y otros temas….y es que, a veces, la casualidad tiene estas cosas.

Mientras los expertos en estos temas barajan las hipótesis y tratan de encontrar las causas del accidente, elevo una oración por los 154 fallecidos y por la recuperación de los que han sobrevivido a la tragedia porque ahora tendrán que sobrevivir también al recuerdo de esa pieza del collage de sus vidas.

Nuestros deportistas olímpicos no habrán logrado el número de medallas que se esperaba, dieciocho en total, pero su solidaridad con las víctimas se hizo patente en todo momento, con sus palabras, ya que sólo algunos desafiaron la decisión del COI, poniéndose el crespón negro.

No entiendo demasiado por qué no dejaron ondear a media asta la Bandera, ni por qué prohibieron a nuestros deportistas lucir un crespón negro tratándose de un accidente aéreo y para honrar la memoria de los fallecidos en el mismo, pero sí que puedo suponer que la culpable de esta decisión del COI es, como siempre, la política, esa “vieja dama” que a veces es bruja debiendo ser señora, que toca algo y lo contamina teniendo la obligación de elevar a los pueblos. Culpable de que se considere un agravio comparativo expresar con un pequeño gesto el apoyo y la condolencia, desde la distancia, a esas familias.

Este collage mío, como se ve, tiene piezas que pinchan si se les pasa la mano, hechas de espinitas clavadas. ¡Qué le vamos a hacer!.

Reconozco que me he emocionado en estos Juegos Olímpicos con muchos de nuestros representantes, como por ejemplo con Nadal, he vibrado con otros muchos como hoy con la Selección de Baloncesto, y he disfrutado con casi todos, incluso con aquéllos que no han conseguido las medallas, porque supongo que su desencanto siempre habrá sido mayor que el que hayamos podido sentir los espectadores desde nuestras casas, sentados en nuestros sillones, el deseo de subir a lo más alto lo llevarían en su corazón, pero no ha podido ser. Una pieza ésta, la de los JJOO de Beijing 2008, que en mi collage se ve tan llena de colorido como la Ceremonia de Apertura cuyo derroche de color fue espectacular.


Y ahora, voy a terminar este lienzo no con una pieza más, sino con un parche porque no tiene categoría para más, el apunte de otra estulticia que contabilizar, y van….no sé cuántas. Bernat Joan, responsable de política lingüística de la Generalitat, ve innecesario estudiar castellano, os remito a la entrada de Juan Alonso en su blog Muy Señores míos, donde comenta esta noticia, porque yo me he quedado sin palabras, salvo recordar aquel proverbio: “No hables si lo que vas a decir no es más hermoso que el silencio”.

LA VUELTA

Aún en mis retinas el azul maravilloso del Mediterráneo, del último lugar visitado, la sal y la espuma son ya recuerdo inmediato, pero recuerdo al fín y al cabo. Quedan atrás los días del descanso merecido, me lo digo yo y me vale con eso, atrás los paisajes por los que he paseado mi vista y también mis pies, sitios que no conocía a fondo y he conocido ahora, y otros viejos conocidos con los que me reencuentro cada año.

Cada vez estoy más convencida de que tenemos un país maravilloso, tenemos la suerte de contar con una enorme variedad y riqueza en nuestras tierras de colores, olores, formas, incluso sabores. En fín, ¡qué os voy a contar!, si seguro que esto ya lo sabéis la mayoría de vosotros. Se me nota en la mirada, como dice la canción, que soy una enamorada de España, así que cómo no se me va a notar también en la palabra.

Muchas veces me he preguntado y me sigo preguntando por qué no me animo a salir más al extranjero y conocer sitios nuevos, realmente el primer motivo es porque mi miedo a volar me lo pone difícil, lo reconozco y es mi reto a conseguir, lo prometo; Mi familia y amigos han utilizado todos los medios posibles para convencerme de las ventajas, seguridad y maravillas que encierra viajar en avión, y yo lo admito, no lo pongo en duda. Otro de los motivos de no salir fuera es el hecho de que hay todavía muchos rincones de España que no conozco y me obligo, al no salir fuera, a conocerlos poco a poco.

En fín, reconozco que soy una miedica, aunque pienso que si fuera yo la que tuviera alas tendría mucho menos miedo a surcar los cielos en un vuelo elegante y grácil. En estos momentos la gracilidad está reñida conmigo, mucho más después de haber tapeado por las calles de Granada, de haber comido las paellas de Alicante y degustado el morteruelo de Cuenca y su famoso alajú, postre que recomiendo, al igual que las berenjenas fritas con miel de caña de Granada. Lugares donde he ido desgranando, sí, como una granada, mis vacaciones y de los cuales traigo en la maleta no sólo recuerdos maravillosos sino también algún kilito de más y un bonito bronceado que me durará, eso sí, unos cuantos días, y es una pena ¡con lo delgada que hace el moreno!.

Pues eso, que he vuelto y estoy dispuesta a retomar con ganas este otro reto de plasmar en mi blog, al que echaba ya de menos, sentimientos, pensamientos, opiniones, como siempre, y a empaparme de vuestras palabras en vuestros rincones, dispuesta a no dejarme nada en el tintero, a abrir el corazón y sacar lo que me hace feliz, lo que me preocupa, lo que me enerva, lo que creo que debo y quiero decir.

Pasaré lista a ver si habéis vuelto ya todos o hay algún rezagado, porque me encanta que estéis ahí. ¿Comenzamos el curso? ¡Pues, a ello!



Imagen "Granada" copyright © Shikilla 2008

EXPLAYÁNDOME

En un alto en el camino, entre viaje y viaje, ahora que vengo de un punto de nuestro mapa de España y me voy a otro, no he podido resistirme a escribir una entrada y, en vista de que no voy a poder cumplir mi promesa de ser menos ácida al menos por el momento, en mis críticas, no ya al Gobierno en particular, sino a todo en general, me vengo a un sitio de confianza donde exponer mis cuitas, sin miedo a que me llamen catastrofista, pesimista o tiquismiquis.

Permitidme explayarme en esta mi casa y la vuestra; por cierto, me pregunto si explayarse querrá decir literalmente “salirse fuera de la playa”, si es así, que lo dudo, cumplo fielmente con la etimología de la palabra, me salgo de la playa para subirme a esta atalaya y gritar a pleno pulmón mi enfado, estupefacción o cabreo, llamadlo como gustéis.

Y es que no le dejan a una ni broncearse tranquila, con o sin bikini de rayas, ¡jolines!, en el momento que coges un periódico, así como quien no quiere la cosa, por dar un vistazo, o ves las noticias en la televisión del chiringuito, aparece alguna cosa que te saca irremediablemente de tus casillas, es como aquél dicho: ¡Hoy hace un día precioso!...pues verás como viene alguien y lo jode (con perdón), bueno, sin perdón ni gaitas.

Me entero que el edil de Alternativa Baix Gaià (marca de ICV-EUiA) en Torredembarra (Tarragona), Lluís Suñé, cuelga en su blog un cartel diciendo "Apadrina a un niño extremeño por 1.000 euros al mes", que ya es para indignarse, y no me basta a mí particularmente como madre y residente en Extremadura que ahora se retracte y diga que pide disculpas si ha herido los sentimientos del pueblo extremeño, porque no era su intención. Digo yo que siendo edil y bloguero podía haber sopesado mejor la intencionalidad que, a mi modo de ver, era clara, y en algún momento pudo pasársele por la imaginación que al pueblo extremeño no le iba a hacer ni pizca de gracia su broma o ironía.

Ahora dice en su blog, y cito textualmente:

“En el texto utilizo la ironía, como respuesta a una situación ridícula, pero cansina, que plantean algunos políticos, y, sobretodo, algunos medios de comunicación. Que día tras día acusan a Catalunya de hacer desaparecer la lengua castellana, de ser insolidarios con el estado... cuando los que vivimos aquí sabemos que es falso. En Catalunya vivimos con alegría nuestras vidas, con nuestras dificultades, con nuestras ilusiones, convivimos con las diversas lenguas y culturas que pertenecen a la riqueza catalana”

Quizás no quieran hacer desaparecer la lengua castellana, entre otras cosas porque no pueden, pero no es falso que en Cataluña quieran imponer el catalán, eso no me lo puede negar a mí ni a los muchos padres que han querido escolarizar a sus hijos en colegios en los que se hable castellano y no han podido.

Insolidarios es lo que parecerán ahora después de la desacertada entrada del apadrinamiento en su blog, algo que tendrán que agradecerle los catalanes al Sr. Suñé.

En cuanto a la alegría, dificultades, ilusiones y convivencia con las diversas lenguas y culturas de la riqueza catalana con las que dicen que viven, puedo decirle que aquí en Extremadura también tenemos la misma alegría, dificultades e ilusiones, pero además de todo eso, muchos extremeños han demostrado que saben convivir con las diversas culturas, no sólo de España, sino también del mundo, ya que fueron muchos los que salieron de su tierra natal para buscarse un futuro lejos de ella; de los muchos lugares a los que fueron a echar raíces está Cataluña. No tengo que recordarle que los ascendientes de muchos de los catalanes de hoy son extremeños o andaluces, eso imagino que lo sabrá.

Hoy no pasan hambre los niños extremeños, es más, muchos de ellos comen un jamón de bellota que, sin menospreciar a la butifarra catalana, muchos quisieran degustar.

Aún habiendo rectificado, le diría al Sr. Suñé un viejo refrán: “Después del burro muerto, la cebada al rabo”, o lo que es lo mismo, para la próxima vez mida no solo la intención sino también el alcance de sus palabras, porque la ironía es un arma que no todos saben emplear adecuadamente, y está claro que usted no es un as de la misma.

A otro asunto. Hoy me seguiré explayando porque no sé cuando podré escribir mi próxima entrada. Anoche, en La Noria, se planteó un debate acerca de la excarcelación del etarra De Juana Chaos, y yo que me senté tranquilamente frente al televisor para relajarme un poco y ver desfilar a las diversas “pedorras de verano” o lo que es lo mismo a estos personajillos a los que acuden las televisiones en el verano porque los de “primera fila” están asistiendo a saraos en Ibiza, o tostándose en Mallorca, de pronto noto como mi adrenalina sube, a medida que avanza el debate.

Estupefacta al comprobar que no solamente no se dijo nada interesante sino que en lugar de estar todos de acuerdo en que es una incoherencia, una aberración, una sinrazón, etc…etc… que un asesino de 25 personas salga a la calle habiendo cumplido 21 años de los 3000 a los que fue condenado, los contertulios se dedicaron literalmente a insultarse entre sí para vergüenza ajena de los telespectadores.

Allí estaba un Jorge Verstringe, absurdo, que esgrimía la democracia como justificación del hecho, una María Antonia Iglesias que cada día me recuerda más a Doña Rogelia, mucho menos atractiva y tierna que la auténtica, y con aire amargado y vengativo hacia todo lo que no sea izquierda, izquierda e izquierda.

En resumen, lo más interesante del debate fueron los mensajes que los telespectadores mandaban, muchísimo más realistas y auténticos la mayoría.

Así que he decidido que a partir del lunes que comienzo mi segunda parte de las vacaciones no voy a concentrarme más que en la lectura del libro que he empezado ahora “La elegancia del erizo”, y a darme vuelta y vuelta en la hamaca, a la orillita del mar.