Sigue lloviendo, aquí lleva todo el fin de semana. Una se resigna a que los únicos días que tiene para salir con amigos, ir de compras, tapear o, simplemente, dejar que sus pasos la lleven donde ellos quieran, se fastidien, porque sabe que el agua es necesaria, es un bien preciado y precioso que nunca viene mal, salvo cuando la naturaleza, a veces cruel, se pasa y nos dice: No querías caldo, pues toma dos tazas e incluso tres.
También me consuelo pensando que esta lluvia, prácticamente generalizada en toda España, sirve para lavar un poco las malas vibraciones, los malos rollos que nos hacen salir de nuestras casillas y que en estos días nos han llevado desde la desilusión y la rabia, en lo político, hasta el ridículo y la vergüenza ajena, en brazos del Chikilicuatre. Lluvia, natural a la vez que necesaria.
Extremadura se empapa, justo cuando Zapatero decide venir de romería, hoy, al pueblo de su abuelo, Alange, bonito pueblo famoso por su balneario que, causalmente y según dice su publicidad: “Equilibra el sistema nervioso, mejora la circulación, aumenta las defensas y mejora el ánimo y la autoestima” Me pregunto cuál de sus inefables beneficios necesitará Zapatero.
Y para recibirle a él y a toda la corte acompañante los preparativos han costado unos 240.000 euros, que se emplearán en allanar un encinar en la finca donde dará un mítin. Además, para acomodar la tradición del pueblo a la visita de Zapatero, la procesión del Corpus donde los niños salen ataviados con sus trajes de Primera Comunión, ha sido adelantada y modificada porque el Presidente llega al pueblo cargado de recuerdos de su abuelo, (el mismo al que aludió cuando María Jesús González la madre de Irene Villa le dijo: Mi hija me sigue haciendo la misma pregunta que cuando era una niña: “Mamá, ¿por qué nos ha pasado esto?”. Póngase en mi lugar. A lo que Zapatero contestó: Estoy ya en tu lugar porque a mí me mataron a mi abuelo.) y quiere compartir esos recuerdos con los asistentes a esa romería, laica eso sí, sin santo ni patrón que venerar, y no le va a aguar la fiesta ninguna tradición, por muy centenaria que sea.
En resumen, si pienso en todas estas cosas en este domingo tranquilo, es como para que se me abran las carnes, así que agradezco que sea el cielo el que tome el testigo y, justiciero, nublado y gris, abra el grifo del agua purificadora y grite con cada gota:
¡Agua va!
A mí, hoy, me gustaría cantar con Juan Luis Guerra:
Quisiera ser un PEZ
para tocar mi nariz en tu pecera
y hacer burbujas de amor, por donde quiera.
¡Y los acuíferos se llenan Shikilla, aquí en Mallorca, como no hay rios, nos viene de perlas, aunque ya están diciendo que esto no es bueno (por los guiris, que están como las hormigas, desesperados porque se pensaban que en el mes de Mayo está prohibido llover...)y algunos recuerdan que no llovía así desde hacía 30 años.
ResponderEliminarSobre el individuo ese que citas, no sabía yo que es de Alange,¡me encantaron sus termas! su hijo predilecto no me encanta tanto, pero tiene que haber de todo...
Bueno, me voy a echar un vistazo a tu otro apartamento a ver si hay algo nuevo.
Un beso.
Me parece que es Juan Luis Guerra.
ResponderEliminarUn saludo
Lo es, Miguel, gracias, un lapsus que ya está corregido.
ResponderEliminarSaludos
Hola Shikilla:
ResponderEliminarRecuerdo los campos de mi Extremadura cuando la lluvia los baña y al llegar este recuerdo a mi mente la inundan de los verdes encina y el olor a tierra mojada con sabor de matrimonio indisoluble y por tanto eterno "agua-tierra".
Lástima que esas maravillas de la naturaleza sean ultrajadas por máquinas arrasalotodo solo para satisfacer el capricho de un politicucho que ha pasado de ser un bambi a ser un cerdo. Y pido perdón a este noble animal de mi tierra al que tanto aprecio y el que tantos placeres gustativos nos proporciona, sobre todo si es de pata negra.
Un abrazo.
Por cierto Shikilla, te acabo de conceder un premio pero no es en absoluto obligatorio hacerle caso.
ResponderEliminarCierto, Shikilla, que el agua es necesaria para evitar todo tipo de sequedades, hasta las que producen el salir con los amigos, ir de compras, tapear o, simplemente, seguir la huella de tus propios pasos. Sé que es un planteamiento egoísta, pero, te contesto también con un refrán (por lo del caldo y las tazas): No hay mal que por bien no venga.
ResponderEliminarLas malas vibraciones de los políticos, no creo que cambien por mor de políticos que hacen fuerza, desde su posición de fuerza, en el intento de beneficiar a sus territorios, por el dudoso sistema de hundir otros.
Al Chikilicuatre, ¡ni tocarlo!: es el hecho cultural e intelectual más claro en muchos lustros: por fin alguien pone en evidencia lo cutre, desde lo cutre: que alguien me diga si el “La, la, la”, o cualquiera de las aportaciones de Eurovisión al mundo de la cultura, es menos friki que “Baila Chiki.chiki”. Lo dico: ¡Ni tocarlo, que llegamos a las manos!,,,
Ahora, si al decir Chikilicuatre, querías decir “chiquilicuatre”, el chiquilicuatre por antonomasia... ¡eso se va aotros lópeces! De eso sí puedes hablar con autoridad, dado el tipo de visitas que recibís por esas tierras en fines de semana lluviosos. (Lo lamento por vosotros).
(Extraña manera de que se te “abran las carnes”; a no ser que tal visita viniese acompañada de un rompimiento de cielo... ¡eso es: lo veo!)
Bonita imagen, parece ser que finalmente tendremos que abrir los embalses porque estarán a rebosar, debe ser que el cielo se ha empeñado en dejar en ridículo a ese Zapatero de las aportaciones puntuales de agua a Barcelona.
ResponderEliminarPreciosa imagen la que nos pones, lo triste es que sitios tan preciosos se vean ensombrecidos por la presencia de un iluminado.
Saludos
Hola Shikilla:
ResponderEliminarBonito lugar debe ser ese.Y como pasa siempre, los que estamos relativamente cerca, sin verlo todavia...
Si, siempre pasa igual cuando vienen los politicos, unos mejores, otros peores.Recuerdo que a la fabrica de cerámica donde yo trabajaba vinieron dos presidentes de gobierno: El tristemente desaparecido Leopoldo Calvo Sotelo y Felipe Gonzalez. El primero vino como un turista mas, con su familia, y haciendo gala de una sencillez extraordinaria, y el segundo vino con sus guardaespaldas, los cuales, antes de entrar, registraron toda la fabrica para comprobar que no habia ningun peligro... Fijate tú que peligro puede haber en una fabrica de ceramica monda y lironda para el presidente de gobierno...por mas vueltas que lo doy, no me lo explico...
En fin, un saludete, gracias por hablarnos de ese bello lugar. Y a ver si nos enseñas mas.
Os agradezco vuestros comentarios y únicamente quiero añadir que la imagen que acompaña mi entrada no es una imagen de ningún rincón de Extremadura, creo, ya que la tomé de google.
ResponderEliminarTenemos por aquí muchos bonitos rincones que nada tienen que envidiar a la imagen que ilustra mis palabras, pero para que quede constancia.
Espero que el agua caída haya resultado beneficiosa para la tierra.
Saludos a todos.